Llevaba muchísimo tiempo con ganas de utilizar la quinoa, pero por unas cosas o por otras, todavía no había preparado nada con ella.

Últimamente parece que se ha puesto de moda este cereal que ya es considerado un «superalimento«, y es que, si los expertos no nos mientes, se dice que:

• Está compuesta en un alto porcentaje de proteínas de alta calidad
• Tiene un índice glucémico bajo
• Es rica en aminoácidos
• Posee una gran cantidad de minerales, vitaminas  y fósforo
• Tiene un alto contenido de Omega 3 (grasa buena)
• Es una gran fuente de fibra soluble e insoluble

Después de leer todas estas propiedades, dan ganas de animarse a probarla, ¿Verdad?. A mi me ha gustado mucho, aunque creo que ha sido sobre todo porque la lima le ha dado un toque muy sabroso. La quinoa sola, bajo mi parecer, es bastante sosa.

Como ya estamos en época de calores y apetecen cosas frescas, he aprovechado para preparar una ensalada con ella. Concretamente de aguacate, queso feta y arándanos desecados con aliño de vinagreta de lima.

Ingredientes para 10 personas:

Para la ensalada:

• 400 gr de quinoa (yo he utilizado una de SOS que combina quinoa integral y quinoa roja)
• 800 ml de agua (de todas formas, quedaros con las medidas que se indican en vuestro paquete de quinoa porque puede variar)
• 2 aguacates maduros grandes
• 300 gr de queso feta
• Arándanos desecados (10 cucharadas soperas)
• Zumo de 1/2 lima o limón (para que no se oxide el aguacate)
• Sal

Para la vinagreta de lima:

• Zumo de 4 limas
• 10 cucharadas soperas de aceite de oliva
• 6 cucharadas de crema balsámica
• Ralladura de tres limas pequeñas
• Sal (al gusto)

¿Cómo lo hacemos?

Ponemos a calentar una cazuela con el doble de agua que de quinoa. En este caso 800 ml para 400 gr de quinoa. En el momento en que de el primer hervor, añadimos la quinoa y la sal, removemos, y dejamos cocinar a fuego medio alto durante aproximadamente 20 minutos. Si veis que se queda seco y aun está durito, añadid más agua.

Pasado este tiempo, apagamos, dejamos reposar con la olla tapada 5 minutos, y posteriormente dejamos enfriar.

Cortamos el aguacate en cuadraditos, salamos, y echamos un poquito de limón por encima para que no se oxide.

Partimos el queso feta en cuadraditos y reservamos.

Picamos los arándanos en trocitos pequeños y reservamos.

Una vez que la quinoa esté fría, ya solo queda ponerla en el plato/bol donde la vayamos a presentar, poner los ingredientes por encima, aliñar y mezclar. Os recomiendo aliñarla un par de horas antes de comerla para que coja bien el sabor de la lima.

Veréis que os va a encantar. La combinación fresca de la lima, con la cremosidad del aguacate, el dulce de los arándanos y el punto fuerte del queso, resulta una combinación espectacular.

Cualquier cuestión, estaré encantada de responderos.

¡Un abrazo grande!

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