Normalmente, cuando empiezan las navidades, nos emocionamos comprando los dulces típicos de estas fechas, y cuando terminan, nos encontramos con una gran parte de ellos sin empezar.
En este caso os enseño una receta de aprovechamiento para utilizar el turrón duro, concretamente, os muestro las espirales de hojaldre y turrón duro que he preparado. Son súper fáciles de hacer y muy ricas, por lo que son una opción perfecta para darle un uso diferente a las tabletas que nos sobran a la mayoría de nosotros después de navidad.
Si lo que os sobra es turrón blando, podéis hacerlas igualmente, la diferencia es que tendréis que derretir la tableta en una cazuelita con un brick de nata, de esta manera se formará una cremita y podréis extenderla encima de la masa de hojaldre. 😉
Ingredientes:
- 1 lámina de hojaldre fresco
- 1 tableta de turrón duro
- 1 huevo pequeño para pincelar
- Papel de hornear
¿Cómo lo hacemos?
Trituramos el turrón duro con la ayuda de un procesador. Si no tenemos, podemos machacarlo con la ayuda de un mazo. Si quedan trocitos pequeñitos no pasa nada, queda bien que se noten las almendritas.
Precalentamos el horno a 200 grados por arriba y por abajo.
Extendemos la masa de hojaldre y cubrimos con el turrón triturado.
Enrollamos y cortamos espirales del ancho de un dedo.
Ponemos las espirales en la bandeja de horno cubierta de papel de hornear.
Batimos un huevo y pincelamos.
Horneamos durante aprox. 15-20 minutos hasta que veamos que están doraditas.
Veréis que el azúcar se caramelizará y quedará oscurito. El sabor os recordará a las almendras garrapiñadas. Queda muy muy rico.
Un abrazo querid@s foodlovers :*
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