Como buena foodlover, me encanta probar cosas nuevas e ir quedándome con los detalles para luego ponerlos en práctica con mi toque personal, por eso, además de enseñaros mis recetas, os iré haciendo de vez en cuanto reviews de mis restaurantes favoritos.
En este caso os voy a hablar del Restaurante Luos, que está en Madrid, en la zona de Chamberí. Concretamente en la calle de Andrés Mellado 5. Se trata de un restaurante asiático de fusión, en el que puedes encontrar deliciosos platos japoneses, chinos o tailandeses entre otros.
El restaurante por dentro tiene un ambiente que llama la atención, ya que los restaurantes asiáticos suelen ser bastante oscuros y tradicionales, sin embargo, este es muy luminoso y tiene una decoración muy cuidada, lo que te hace sentir muy cómodo.
Antes de nada, decir que me faltan un par de fotos porque como dije en mi primer post, soy muy glotona (y mi novio también) y cuando nos dimos cuenta ya habíamos empezado. Y claro, la foto no luce igual , así que decidí dejarlo estar jeje.
Nada más llegar, nos ofrecieron la carta y nos preguntaron por la bebida. Nosotros, de entre un amplio abanico de cervezas asiáticas escogimos las que veis en la foto. La verdad es que el sabor de ambas era muy parecido, estaban buenísimas. Junto con eso, nos trajeron una especie de patatillas tailandesas, cuyo sabor me recuerda a las típicas patatas fritas «light» pero añadiéndole azúcar y pimentón picante por encima. Aunque suene raro la combinación sorprende y está muy rica.
De primero, pedimos una «sopa thai tom yam kum» y «Tempura de berenjenas rellenas de queso gouda» . La sopa llevaba langostinos y setas principalmente. Estaba buena pero para mi gusto tenía demasiado jengibre y se comía demasiado el sabor del resto. En cambio, las berenjenas estaban espectaculares. La tempura era muy crujiente y el queso derretido junto con la salsa de soja le daban un toque perfecto.
De segundo, pedimos para compartir «Pad thai», que son nodles tailandeses al wok con marisco y verduritas. Nos encantó. La pasta y los ingredientes estaban en su punto exacto de cocción y la cantidad de salsa era la adecuada. Me han recordado a los fideos chinos que ya os enseñé.
Además, pedimos «Pato thai con almendras». Este plato me pareció muy rico también. El pato estaba súper tierno, tanto que se deshacía al cortarlo. La salsa era muy dulce y sabrosa, el contraste con el salado del pato era ideal.
Por último, pedimos un postre que se llamaba «Bomba de chocolate» . La verdad es que literalmente lo era. Se trataba básicamente de un coulant de chocolate con helado y unos paquetitos fritos de masa filo rellena de chocolate. Una delicia.
De precio en la linea de todos los restaurantes de fusión en Madrid. Unos 20 € por persona. Por cierto, la atención del personal fue excelente. Nos atendió una chica tailandesa que hablaba un español perfecto, y la verdad es que se agradece que te expliquen todo de manera tan clara en este tipo de restaurantes.
Ahora que ya tenéis mi opinión, es decisión vuestra si os animáis o no. Ya me contaréis. 😉
Un besito